Celebra parroquia del Niño Doctor , Domingo de Pascuas y pide no quedarnos en el sepulcro del pecado y la obscuridad.
Tepeaca de Negrete.-En celebración eucarística del Domingo de Pascua, la parroquia del Niño Doctor a través del párroco Jorge de la Rosa Caballero dijo que Jesús triunfo sobre la muerte y resucitó para darnos la esperanza de la vida eterna
» Este es el día más importante para nosotros en nuestra vida de fe….desde hace más de 2 mil años nuestra iglesia ha proclamado a Cristo vivo y resucitado ,que nos viene a dar la esperanza a cada uno de nosotros …no nos quedemos en la tristeza del sepulcro … Dios nunca será un funeral y muerte …cuando pecamos, cuando creemos en la muerte , en la violencia, la intolerancia , seguimos la obscuridad del sepulcro… Cristo es vida y ha resucitado , no nos quedemos en la obscuridad del sepulcro… vivamos la alegría de la resurrección que nos lleva a ser promotores de la paz y la justicia», subrayó
En homilía dominical de este 9 de abril, el padre de la Rosa Caballero subrayó que este domingo de Pascua de resurrección es de fiesta para la iglesia católica por la resurrección de Jesús, que nos da esperanza de vida eterna y la confianza de que no nos va a fallar .
«Jesús resucitó como lo había anunciado…Cristo vive y nos da la esperanza, y no nos va fallar ni nos va a defraudar.. Ese Cristo vivo es nuestra esperanza y a partir de este día vayamos y anunciemos esa noticia.. Dios no es muerte, es vida y eso debemos anunciar », puntualizó
Por otra parte en la catedral poblana el obispo auxiliar Tomás López Duran encabezó la celebración eucarística de este Domingo de Pascua y afirmó que este día es el trinfo de Jesús y el perdón que nos dio desde la Cruz es el camino para conseguir el amor y la paz.
El obispo auxiliar resalto la importancia de que cada persona mantenga la esperanza de que , con el cambio interior de cada ser humano, se puede alcanzar un ambiente de alegría y perdón.
» No se puede entender la cuaresma, la Semana santa sin el triunfo de Jesús sobre la muerte…este es el mensaje maravilloso de esperanza y alegría que nos dio Jesús con nuestro bautismo», destacó