Los tiempos de la pandemia del COVID-19 marcaron en 2020 en Tepeaca un parteaguas , un punto de referencia , un antes y un después que , sin lugar a dudas,cambió la percepción de todos en mucho aspectos de la vida familiar, social y cotidiana en el futuro próximo cercano.
La pandemia ocasionó que por vez primera que se tenga memoria desde hace cientos de años, de la ancestral Tepeyacac, la Segura de la Frontera y hasta la Tepeaca de Negrete , se suspenda el tianguis y trueque de viernes en nuestro milenario municipio , que a pesar de todo, contra viento y mareas, pudo festejar sus primero 500 años de fundación española.
Los tiempos de la pandemia del COVID-19 marcaron en 2020 en Tepeaca un parteaguas , un punto de referencia , un antes y un después que , sin lugar a dudas,cambió la percepción de todos en mucho aspectos de la vida familiar, social y cotidiana en el futuro próximo cercano.
El complicado año impidió que el Niño Doctor de los Enfermos en 1942 participara en la procesión anual de viernes Santos en la capital poblana, por aquellos días de abril del presente año y que también impidiera festejos del Día del Niño, festividades de San Francisco ,y ya como colofón las posadas y celebraciones navideñas tan gustadas en todo el munipio.
El fatídico 2020, trajo el dolor por la partida de decenas de tepeaquenses que perdieron la batalla contra el mortal COVID -19 pero también la esperanza por una vacuna que brilla fuertemente porqué que puede devolvernos parte de nuestra normalidad perdida por esa enfermedad .
El difícil 2020 también trajo en Tepeaca y toda la región momentos complicados por el actuar de la delincuencia organizada , las tomas clandestinas y los imparables robos en transporte publico y carreteras además del terrible y artero crimen del líder de los comerciantes Luís Salazar en los primeros días de agosto.
Sin embargo el 2020 no fue del todo malo . También trajo parte de la dignificación que nuestra ciudad necesitaba y que se logró con las acciones del gobierno municipal y estatal, en los 500 años de la fundación, para devolver el esplendor olvidado por muchos años a nuestro centro histórico y calles aledañas.
Con las escuelas vacías , sin fiestas patronales , con innumerables perdidas de empleos y el dolor inconsolable de muchas familias, finaliza el 2020 pero como decía anteriomente , con la luz esperanzadora de que que el próximo 2021 sea mejor en todos los aspectos y traiga salud y bienestar para todos .
Ojalá y así sea.